por Scarrot el Mié Jul 23, 2008 12:07 pm
Hay varias cosas que veo que no comprendéis:
1) El fútbol es un deporte en el que los actores únicos y principales son los futbolistas. Todo lo demás (periodistas, directivos, representantes… etc.) son chupópteros, parásitos, que se enriquecen gracias a los ingresos que generan los futbolistas con el espectáculo que desarrollan sobre el césped. Si no te gusta el espectáculo que dan, simplemente deja de ir al fútbol. Hay otros espectáculos y entretenimientos a los que puedes atender. Defender a los chupópteros y a los aprobetxategis y atacar a los futbolistas es atacar al Fútbol en sí mismo.
2) Se arremete contra los futbolistas porque, según parece, no cumplen con su deber. Para mí su deber es dejarse la piel en el campo. Creo que el “deber” de los aficionados es animar al equipo, esté quién esté, en la categoría que sea. Por tanto, los aficionados que no animan a los jugadores están haciendo tan mal su “trabajo” como los futbolistas que no se dejan la piel en el campo. Por tanto, un aficionado que no anima a sus jugadores en todas las circunstancias no puede pedir cuentas porque no cumplan con sus obligaciones, ya que ser aficionado a un club conlleva también obligaciones (animar) y no sólo derechos (echar mierda a los jugadores).
3) La Diputación, como máximo acreedor, tiene derecho a nombrar uno de los tres jueces de la Ley Concursal. Los jueces de la Ley Concursal son quiénes deciden qué se hace y qué no se hace, es decir, Badiola ya pinta muy poco. Por tanto, Aranburu, como representante de toda la plantilla realista que es, puede solicitar una reunión con su jefe – en este caso la Diputación – cuando quiera. ¿Hay alguien que no tenga derecho a hablar con su jefe? ¿No está suficientemente claro que quién tiene la últimisima palabra en la Real son los jueces concursales? ¿No tiene por tanto derecho el representante de los trabajadores a hablar con uno de sus jefes?
4) Las razones que a muchos os mueve para criticar de tal manera a la actual plantilla realista es totalmente política y no deportiva. Pero no tenéis agallas de llamar a las cosas por su nombre. ¿No queréis que la Real sea un equipo “nacionalista”? Me parece muy bien. Pero no lo disfracéis de razones deportivas porque no cuela por ningún lado. Decid claramente que las críticas a determinados futbolistas son por causas políticas. Odiáis lo “abertzale” y no queréis animar ni sufragar a esta gente, aunque jueguen a fútbol y sean de la Real. No problem. Se habla, se vota en asamblea y punto. Creo que ya es hora de poner fin a esta caza de brujas a los futbolistas. Caza de brujas orquestada por los supuestos hinchas del equipo. ¡Menudos hinchas!