El día de la despedida de Xabi y Txarly fue de los más grandes y bonitos que hemos vivido en Anoeta, prácticamente todo fue prefecto y hay que felicitar a los organizadores.
Pero hubo dos detalles que no me gustaron:
-1. Que le pusiera a Illarra el brazalete, fue una cosa totalmente prescindible en esa fiesta, pero ya que se hace creo yo que antes estaba Imanol para recibirlo, o Zuru o algunos otros. Illarra posiblemente es nuestro mejor jugador, pero después de dejarnos tirados en un momento muy critico no podemos olvidarlo y además premiarlo de esta manera. Los canteranos tienen que tener claro que si nos dejan tirados de mala manera, la puerta se cierra para siempre. Reconozco que repescarlo ha sido un gran acierto, pero quitarle el brazalete a Imanol o Zuru para dárselo a él, no me parece correcto.
-2. Ver en la fiesta a Díaz de Cerio. No sé como un jugador que cuando nos vamos a 2ª nos deja tirados por el Bilbao yéndose gratis y de mala manera puede volver de invitado a Anoeta a una celebración. Si nos olvidamos de estas cosas estaremos condenados a que se repitan. Hay que dejar claro a todo el mundo que el que se va de esas maneras deja de formar parte de nuestra familia.