Ciertas gentes del movimiento independentista catalán dicen practicar la desobediencia civil de unas leyes que consideran injustas.
La desobediencia civil a la ley, según cuantos la han analizado, teorizado y practicado, consiste en comportamientos de desobediencia pública, pacífica, y atenida a las consecuencias. Esta es la desobediencia civil que pusieron en práctica Thoreau, Gandhi y Martin Luther King. Pues bien: la desobediencia independentista es pública y (relativamente) pacífica, pero rechaza atenerse a las consecuencias. Esa desobediencia no es desobediencia civil, sino ilícita.