...de los jugadores.
Tras la lesión de X.Prieto, importante pero no decisiva, y a falta de 9 jornadas para el final, lo único que debería tener la plantilla de la Real es HAMBRE de ascenso. HAMBRE para jugar 9 partidos a cara de perro y pensando que son 9 finales. HAMBRE para que llegue el partido del domingo o del sábado y conseguir los 3 puntos.
No nos hagamos líos. A falta de 9 jornadas, aunque Lillo sea un mago de la estrategia no va a poder hacer más que ultramotivar a sus jugadores y a mentalizarlos para que salgan a ganar, sí o sí. Y no es poco. No esperemos revoluciones tácticas, cambios de filosofía, etc. A estas alturas de la temporada, los partidos son totalmente anárquicos, fuera de cualquier sistema, donde lo que vale es el HAMBRE por ganar, por conseguir los objetivos...y el temple y la frialdada que se tenga para conseguirlo.
Lillo, sea bueno o malo, sólo puede tener un papel de motivador y dinamizador de las conciencias de los futbolistas. No nos hagamos líos. Faltando lo que falta, muy poco, ya sólo vale salir al césped, agarrar por el cuello al enemigo y morderle hasta lograr su derrota. Los 3-2-3-1-1 o los 4-4-2 o la jugada "3-2" no sirven, ya,desde este momento. Lo único que hace falta, y mucho, es el HAMBRE.
¿Tienen HAMBRE por subir, nuestros jugadores?
He ahí la cuestión.
P.D Otra cosa será el año que viene...pero eso es otra historia, y deberá ser contada en otra ocasión (Michael Ende, La Historia Interminable)