Necesitamos conocer cómo funciona el tema para poder arreglarlo.
Para que los ricos se hagan más ricos tienen que copar los diferentes mercados y para ello es necesario contaminar, ahí van algunos ejemplos:
La leche: Antes venía la lechera a tu casa y trasvasaba la leche de su marmita a tu cazuela. Nula generación de residuos. Claro que entonces el mercado de la leche estaba repartido en infinidad de explotaciones familiares. La gente toma leche todos los días por lo tanto, pongamos unas normas sanitarias (siempre la salud y la seguridad como excusa) que las pequeñas explotaciones no puedan cumplir y..... ¡ya tenemos el mercado entero para unos pocos ¡ Ahora bien, no podemos gastarnos mucho dinero en personal repartiendo leche por ahí. Solución metemos la leche en botella o tetrabrik y que cada uno se la coja de la tienda. El beneficio de la venta de leche que antes se repartía entre miles de explotaciones familiares ahora los tienen entre unos pocos.
¿Qué sucede con los perjuicios que ocasiona la generación de tanto residuo? ¿La soportan quienes se benefician del negocio? ¡ Ah, no! ¡Hasta ahí podíamos llegar! La eliminación de los residuos es un tema social, de todos, por lo tanto ese coste se asume entre todos.
El agua: Aquí si que han entrado a saco las multinacionales. Si nos fijamos ahora casi todas las marcas conocidas de agua pertenecen a Coca Cola, Pepsi, Nestlé, etc.
Aquí también el truco es sencillo. Primero se consigue que los inútiles de los políticos sirvan en el grifo un agua que no hay quien se la beba, segundo hay que eliminar de plazas, jardines, paseos y playas todas las fuentes, tercero hay que crear moda de pedir un botellín de agua en el bar. Antes si el niño tenía sed siempre había una fuente a mano, o si no, entrabas en un bar pedías un vaso de agua y te lo daban de mil amores. Ahora no, nos han embrutecido, y si pides en un bar un baso de agua te miran como si les quisieras arruinar.
Bueno, ya está conseguido. Millones de botellas de agua vendidas a un precio de escándalo, grandes beneficios para las multinacionales. ¿Y los residuos que generan todos estos miles de millones de botellas ? ¿Los pagan las multinacionales? Déjelo, no se preocupe, nosotros nos hacemos cargo, la sociedad....
Las gasolineras: Antes en las gasolineras había operarios que realizaban las operaciones de llenado de depósitos. Las compañías petroleras pensaron cargarse a la mayoría para obtener más beneficios, por lo que decidieron que fuéramos los propios usuarios quienes nos llenáramos los depósitos. A partir de aquí cada vez que se llena un depósito de gasolina se emplean uno o dos guantes de plástico y/o desperdicio de papel para limpiarnos las manos del olor a gasolina / gasoil.
Nótese aquí que el tema de la seguridad en las gasolineras solo se esgrime en aquellas facetas que no afectan al beneficio de las multinacionales. Me explico; prohibido repostar con las luces encendidas, el motor en marcha y una bastante nueva , no utilizar el teléfono móvil que puede provocar explosiones. Como se ve estas prohibiciones no afectan en absoluto a los beneficios de la multinacional. Sin embargo hay una prohibición que parece de pura lógica que es la siguiente: “Prohibido manipular líquidos altamente inflamables y tóxicos a personas no preparadas o entrenas.” Pero aquí ya estamos atacando a los beneficios de las petroleras porque esta prohibición implica poner personal preparado para servir la gasolina que era lo que nos habíamos cargado (el personal) . Pero me he desviado de la cuestión. Aquí también los beneficios son para la multinacional y el perjuicio de desechar miles de millones de guantes de plástico y millones de kilos de papel pues lo asumimos entre todos “la sociedad”, que para eso utilizamos todos las gasolineras.
Los pesebres de comida basura: Tener un restaurante en donde usted se sienta a comer encima de un mantel que luego se lava, con unos platos, vasos y cubiertos que luego se lavan requiere personal y no deja muchos beneficios. ¿Cómo conseguir grandes beneficios? Servimos porquería estandar que nos sale barata porque la compramos por miles de toneladas. La servimos en envoltorios bonitos para que no se vea tanto la mierda y obligamos al cliente a que se la lleve a la mesa y, con un poco de astucia ( “Por favor, al terminar rogamos deposite su bandeja en los lugares señalizados. Ayúdenos a mantener el local limpio”) logramos que casi hasta se limpien la mesa. De esta forma casi no hace falta personal y los beneficios son enormes. ¿Qué pasa con los kilos y kilos de catón , papel y plástico que se generan? No se preocupe usted, señor MacKingKentucki , ya nos hacemos cargo nosotros...la sociedad.